[Art: voy a pegar aquí el articulo porque después de tiempo va a ser difícil encontrarlo.]
www.Lne.es 27/04/2010
Corvera
Un vecino amenaza con hacer huelga de hambre si la vía a Llanera afecta a su panera
Ramón Amor ve truncado su deseo de hacer un museo etnográfico en Molleda
Molleda
por Illán GARCÍA
Ramón Jesús Amor, ante su panera rehabilitada, con la autovía A-8 al fondo. foto por Miki López
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«No me van a parar», aseguró Ramón Jesús Amor para criticar su clara oposición al trazado de la autovía Avilés-Llanera a su paso por Molleda. Su enfado no sería tal si no se truncara su trabajo de 8 años basado en la recuperación de una panera de 1826, el «único» molino harinero concejo y una casa de 1882. Estas construcciones se hallan en Barrio García. Por el momento, Amor ha abandonado su labor. «¿Qué voy a hacer si no?», se lamenta el corverano, que no duda en ponerse en huelga de hambre si, por fin, el trazado de la vía «destrozar el patrimonio histórico del concejo». Los proyectos que Amor tenía en mente quizá nunca vean la luz, pero su lucha por lo que considera justo no cesará. «Si quieren acabar con el patrimonio tendrán que venir aquí, a Barrio García a verme, esto es una guerra», subraya el corverano. Además, su intención de construir un museo etnográfico se ve cada vez más lejos. «Llevo muchos años recopilando material como las piezas de un llagar y cerámica negra con el objeto de enseñar la riqueza del patrimonio de nuestra tierra», aseguró Amor, que pidió explicaciones al ex alcalde y director general de Patrimonio, José Luis Vega, del «atropello» a la arquitectura tradicional.
Barrio García es una de las localidades de Molleda que más afectada se verá con el nuevo trazado de la vía a Llanera. Hasta hace unos meses, la nueva carretera no afectaba a este núcleo pero con las nuevas modificaciones, vecinos como Amor pusieron el grito en el cielo. «Rechacé la autovía desde siempre, ni quiero que pase por El Escañorio ni por Molleda», remarcó Ramón Jesús Amor que se postuló a favor de la conexión de la autovía del Cantábrico y la carretera a Llanera a la altura de Nuña «porque no molesta a nadie y además, sale a mitad de precio».
Amor se quejó además que la rehabilitación de la panera de 1826 se hizo gracias a una subvención del Principado que ayudó a financiar la obra y es «ahora quien la quiere tirar». «Llegaron a felicitarme por cómo había recuperado el edificio utilizando aceite de linaza, óxido de hierro y esencia trementina, como se hacía en siglos pasados», se lamenta el corverano.