Alejandro Suero Balbin y Acisclo del Valle Blanco
Posted: Sat May 28, 2011 9:07 pm
Alejandro Suero Balbín nació el 26 de febrero del año 1.847 en Cúe y emigró joven a Cuba en busca de una vida mejor. En el año 1.870, con unos pesos en el bolsillo que había conseguido gracias a su trabajo anterior en Sancti Spiritus, se instaló en Ciego de Ávila. En el año 1.873 contrajo matrimonio con la Spirituana María de la Concepción Rodríguez Venegas de la Paz, con la que tuvo cuatro hijos, esta joven pertenecía a una de las familias fundadoras del poblado. El día 21 de agosto de 1.885 juró el cargo de alcalde de este pueblo. Al llegar el periodo de renovación para el cargo, Suero Balbín, decidió abandonar la política y dedicarse por entero a los negocios. Sin embargo pronto se vio obligado a abandonar esta tierra, que lo había acogido como a un hijo, para marchar al exilio.
Permaneció en España y Francia hasta bien entrada la republica. Aunque no volvió más a Ciego de Ávila. Después de varios años en Europa retornó a Cuba, pero esta vez se estableció en Cienfuegos, y allí logró acumular una de las fortunas más grandes de esa ciudad.
En la última década del siglo XIX, el comerciante español Celestino Caces construyó una casa en Punta Gorda, conocida como la Quinta Morisca. Cuando este hombre se retiró de los negocios se la vendió a Alejandro Suero Balbín, quien luego, se la regaló a su hija Amparo como regalo de bodas al contraer matrimonio con el acaudalado comerciante Acisclo del Valle Blanco. Éstos fijaron su residencia en esta quinta, transformándola en el suntuoso Palacio de Valle y concluyendo las obras en 1.917. Pero D. Acisclo lo disfrutó apenas dos años, ya que murió de infarto en 1.919, a los 54 años. El palacio quedó abandonado en 1922, cuando la dueña y sus ochos hijos viajaron a España.
Alejandro Suero Balbin y Acisclo del Valle Blanco, fueron dos Asturianos que constribuyeron al desarrollo economico del Camaguey y Villa Clara.
Permaneció en España y Francia hasta bien entrada la republica. Aunque no volvió más a Ciego de Ávila. Después de varios años en Europa retornó a Cuba, pero esta vez se estableció en Cienfuegos, y allí logró acumular una de las fortunas más grandes de esa ciudad.
En la última década del siglo XIX, el comerciante español Celestino Caces construyó una casa en Punta Gorda, conocida como la Quinta Morisca. Cuando este hombre se retiró de los negocios se la vendió a Alejandro Suero Balbín, quien luego, se la regaló a su hija Amparo como regalo de bodas al contraer matrimonio con el acaudalado comerciante Acisclo del Valle Blanco. Éstos fijaron su residencia en esta quinta, transformándola en el suntuoso Palacio de Valle y concluyendo las obras en 1.917. Pero D. Acisclo lo disfrutó apenas dos años, ya que murió de infarto en 1.919, a los 54 años. El palacio quedó abandonado en 1922, cuando la dueña y sus ochos hijos viajaron a España.
Alejandro Suero Balbin y Acisclo del Valle Blanco, fueron dos Asturianos que constribuyeron al desarrollo economico del Camaguey y Villa Clara.